Estimada Lic. Ekateriny Marón Nichols,
No era mi intención hacer de este asunto algo personal, pero ya que usted trae a cuenta este tipo de efectos, permítame señalarle, primero que nada, que su redacción resulta sumamente difícil de interpretar. Está plagada de faltas de ortografía, de gramática y de puntuación. ¿Es así como redacta la titular de la Dirección de Cultura de un ayuntamiento?
Como única respuesta a sus aseveraciones, hago un desglose con el fin de precisar los puntos de los que usted parece no tener memoria o que, simplemente, pretende ignorar:
1. Menciona usted, en la primera línea, la: “MALA DIFUSION (sic) QUE HACES DE ESTE AYUNTAMIENTO” refiriéndose a mi mensaje inicial. Yo me pregunto: ¿el señalar una inconformidad es hacer mala difusión? Tengo entendido que es un derecho ciudadano y que está asentado en nuestra Constitución. Además no me refiero al desempeño del Ayuntamiento, sino a las acciones específicas en torno al rubro de la cultura y las artes. Es decir, de la Dirección que le fue encomendada a usted. No es lo mismo.
2. Es verdad, como usted lo hace notar, que me he visto beneficiado con un viaje redondo por avión, Monterrey-Tijuana-Monterrey, para hacer la presentación del libro Perros de agua. Un libro, por cierto, editado por el Ayuntamiento de Tampico en 2007. El viaje se hizo en el mes de mayo de 2008. Si atiende usted a lo que escribo en el mensaje original, leerá que yo escribo: "A partir de este año..." y me refiero a 2009. No antes. Cabe recordarle que como compensación de dicho viaje se impartió un taller gratuito durante el verano de 2008 en la Casa de la Cultura. Es preciso recordarle también que en febrero de este año usted aprobó una subvención que yo solicité para viajar a un congreso de literatura en Mexicali y que tendría lugar en mayo de 2009. Usted misma fue quien canceló dicho apoyo a menos de un mes de la fecha en que tuviera lugar dicho congreso. Cabe señalar que tuve que hacer el uso imprevisto de mis propios recursos con el fin de cumplir con ese compromiso, al cual fui invitado como representante de mi ciudad y de mi estado. Si usted me hubiera dicho que no había apoyos desde un principio, yo hubiera tenido tiempo de buscar apoyo de las autoridades estatales o patrocinios del sector privado, y no dañar mi economía, como sucedió. Ahora yo quisiera preguntarle a usted los nombres de los artistas que han sido beneficiados con un apoyo similar en lo que va del año.
3. Con respecto a mi labor como docente, es curiosísima su forma de ver las cosas. El impartir una clase para un grupo de alumnos implica, por derecho, una remuneración. Es un trabajo, un empleo. O, según su lógica, ¿todos los maestros que imparten talleres en la Casa de la Cultura son beneficiarios de la Dirección de Cultura? ¿Cualquiera que trabaje en esa dependencia es beneficiario de un apoyo? He de recalcar que mi pago provenía de las cuotas fijas que cubrían los estudiantes y que se dividían de este modo: 60% para quien imparte el taller y 40% para la Casa de la Cultura. Me quedé sin estudiantes, también es cierto. Las razones por las cuales mis estudiantes decidieron no asistir más a ese taller pertenecen sólo a ellos. Pero me sorprende lo siguiente, ¿a qué se refiere usted con “POBRE PROPUESTA DE TRABAJO”? Mi propuesta no fue, para nada, pobre. Está respaldada por mi trayectoria. Además consta en que nunca recibí un solo señalamiento negativo en torno a mi desempeño como docente en la Casa de la Cultura. De haber sido pobre, ¿cómo pudo usted haberme contratado en un principio y con su visto bueno?
4. Si menciono las medidas de austeridad no es porque ponga en duda que hay crisis, todo lo contrario. Lo menciono porque cubrir el costo de la renta de un edificio, cuyo monto no ha sido aclarado por usted, no obedece a la urgencia de tales medidas de austeridad. Afirma que las oficinas de Cultura se trasladaron a ese edificio porque “MUCHO SE QUEJABAN LOS ARTISTAS DE LAS PESIMAS CONDICIONES (DE OFICINA) QUE TENIA ESTA DIRECCION”. Yo en lo personal no he escuchado queja alguna. Pero si cuenta usted con esa disposición y presteza para hacer un gasto de renta de un inmueble, en función de lo que le escuchó usted decir a algún artista, ¿por qué no también escuchar la opinión que ellos guardan con respecto de las nuevas cuotas de la Casa de la Cultura?
5. Dice usted que el contrato de Casa Fernández se hizo desde el año pasado. No puedo estar enterado de la información que no tengo a mi alcance. Pero supongo que como muchos otros, ese contrato se puede reestructurar, renegociar e, incluso, cancelar. Sobre todo en función de una contingencia tal como la de una crisis económica mundial. Pensando que en años anteriores las cosas funcionaban sin la Casa Fernández, es claro que esta casa no aportará ningún beneficio tangible a la cultura de la zona, sino al bienestar de los funcionarios de la cultura.
6. Ahora, y con mayor importancia, reitero que usted no ha aclarado el monto de la renta de Casa Fernández. Supongamos que son $20,000 pesos al mes. Dice usted que se requieren de $500 pesos para solventar diversas necesidades por evento en la Casa de la Cultura. Aquí va una simple operación matemática: 20,000 / 500 = 40. Con la renta mensual de la Casa Fernández se pueden llevar a cabo 40 eventos en un mes. Contando un evento por día, resta una ganancia: 40 eventos, menos 30 días que tiene en promedio un mes, da 10 por resultado. ¿Cuántos eventos apoyó la Dirección de Cultura durante el mes de agosto en las instalaciones de la Casa de la Cultura? O una operación aún más sencilla: dos son más que uno. El mantenimiento de dos edificios por fuerza deberá ser más costoso que el mantenimiento de uno. ¿Por qué no sacarle todo el provecho a un solo edificio que ya es propiedad de la ciudad y que, por ende, no paga renta?
7. Al respecto de “ESTA NUEVA ESPECIE DE AYUDA PARA LA CASA DE LA CULTURA, MAS COMO APOYO Y NO COMO TARIFA”, ¿por qué no informó usted a la sociedad sobre este nuevo cobro a través de los medios adecuados? ¿Por qué no se encuentra la descripción completa de este trámite en el sitio electrónico del Ayuntamiento de Tampico? ¿Por qué no está enterada la comunidad artística? Si la Casa de la Cultura corre el riesgo de irse a pique, como usted lo ha planteado, ¿por qué no consultar con la misma comunidad artística para evaluar en conjunto las vías alternas más convenientes de recaudación de fondos en beneficio del recinto?
8. Usted me invita a visitar la Casa de la Cultura para darme cuenta de: “COMO ESTAN DE IMPECABLES Y HERMOSAS LAS INSTALACIONES” Yo le invito a hacer lo mismo, pues veo con preocupación que usted nunca ha utilizado los sanitarios de la Casa de la Cultura, donde no hay jabón, papel higiénico y, en ocasiones, falta el agua. Olvida usted que yo ya he estado ahí, impartiendo el taller y, también muy recientemente como usuario. Es alarmante pensar que durante el campamento de verano de la Casa de la Cultura se haya puesto en peligro la salud e integridad de los niños y adultos participantes, al tener los baños en tales condiciones y de frente a estos nuestros tiempos de influenza. ¿No existe presupuesto asignado a estos rubros?
9. Es categórica esta afirmación suya: “UNA PEQUEÑA APORTACION DE 500 PESOS”. Usted demuestra que no valora el trabajo de los artistas y promotores culturales al pretender implementar este cobro. Los esfuerzos que se requieren para llevar a cabo obras de creación, como montajes teatrales, textos literarios, coreografías, música, cuadros, fotografías y esculturas, resultan enormes para cualquier artista. En nuestro país, como usted debe saberlo, el pago que los autores reciben por estas obras jamás corresponderá con la cantidad de energía invertida en su creación. Quien sea que se dedique a las artes sabe que el artista no vive de sus obras. Aparentemente usted no lo toma en cuenta. ¿Desea usted sumar un obstáculo más a la ardua tarea que implica la difusión y promoción del trabajo de los creadores, al cobrar por el uso de las instalaciones de una casa de cultura municipal creada expresamente para estos fines? De frente a la crisis mundial, más que nunca los institutos de cultura deben consolidar la divulgación y promoción de los trabajos artísticos y la formación de sus autores. ¿Olvida usted o sencillamente ignora que es ésta la misión de la Dirección de Cultura del Ayuntamiento de Tampico?
10. Agradezco que usted me haya felicitado por ejercer un derecho ciudadano.
Lamento mucho que se haya tomado una simple manifestación de ideas divergentes a las suyas como una afrenta personal.
Por esta razón, me veo en la necesidad de quedar a sus órdenes en el futuro sólo si es con el fin de discutir en conjunto las posibles vías de procuración de fondos para la Casa de la Cultura. Si usted pide mi colaboración a ese respecto, tenga la certeza de que con todo gusto se la proporcionaré.
Mi única intención ha sido sólo informar sobre un cobro que considero injusto y alevoso y sobre una renta, a todas luces, exorbitante.
El destino final de este asunto quedará en manos de los ciudadanos y de los artistas del sur de Tamaulipas.
Reciban todos, nuevamente, mis saludos,
Marco Antonio Huerta
http://moteltampico.blogspot.
Marco, ya leí las respuestas a tu carta original. Aprovecho tu blog para dejarte mi opinión.
ResponderEliminarDe todo, lo que más me apena es la respuesta de Katty Marón. Me parece que muestra a una directora de Cultura más movida por el coraje que por la razón.
Además es el retrato de la desgracia de la política cultural de este país: el funcionario que cree que "apoyar" a un artista lo debe volver sumiso y le quita el derecho ciudadano de opinar sobre la gestión pública.
La mención que hace de tus clases en la Casa de la Cultura da pena. Lo triste es ver que así es como se piensa en la actual Dirección de Cultura. "Yo te empleé, ergo, no te puedes quejar". Claro, piensan que los artistas deben agradecer el dinero que reciben por hacer un trabajo. Da tristeza.
Respecto a la Casa de la Cultura, debo decir que yo traté de reconocer siempre -desde las páginas del diario en el que trabajaba-el trabajo de Irma Holguera. Me pareció siempre muy valioso que se tratara de un espacio público abierto para todos los artistas. A veces hasta rayando en el ridículo.
Por eso leo con tristeza una frase: "LOS ARTISTAS HAN RECIBIDO SIEMPRE TODO GRATIS... Quiero decir, la frase es estrictamente cierta. Pero en ella hay un tono francamente odioso que, creo, tú has explicado de mejor manera.
En fin, sin estar en Tampico puedo sentir que algo comienza a gestarse en el ambiente. Lo que sea que esté sucediendo, aun cuando al final la Dirección responda con hostilidad, será positivo.
De pena ajena los comentarios de nuestra flamante Directora de Incultura, vemos una vez más que los puestos de funcionarios como ella fueron otorgados por compadrazgo, buenas relaciones y no por capacidad conocimiento o trayectoria, una lástima su respuesta. Muy visceral se vio
ResponderEliminarPero, hemos recibido todo gratis? Acaso no, el presupuesto del Ayuntamiento y por ende de la casa de la cultura, sale del bolsillo de la sociedad civil (incluidos lo artistas)? Acaso no estamos pagando por ello? porque he sido beneficiado por "la gratuidad" de los servicios de la Casa de la Cultura y de la Dirección de Cultura del Ayto. Pero de nueva cuenta, acaso no hemos pagado por ellos desde antes? O de dónde saca el Ayto dinero?
ResponderEliminarMA Camero
Q NOS PODEMOS ESPERAR CON ESTA ADMINISTRACION Q
ResponderEliminarPRIMERO CREA COLONIAS Y DESPUES LOS MANDA GOLPEAR,Y NO ACLARA GASTOS DE ADMINISTRACION Y TODABIA SE MOLESTA POR Q SE LE PIDEN CUENTAS